El escritor español Fernando Savater, en búsqueda de un método para explicar a su hijo de 15 años qué es la ética, escribió un libro llamado “Ética para Amador”, que terminó dándole notoriedad mundual. Este texto consta de 9 capítulos, posee una redacción sencilla y está dirigido a jóvenes lectores.
El autor comienza el libro, con el relato de un hecho personal, sucedido entre él y su hijo (Amador), y realiza una breve introducción de lo que es la ética. Habla de cosas buenas y cosas malas, que las define como las cosas que nos convienen y las cosas que no, y resalta la existencia de una paradoja en estos conceptos. Con el desenvolvimiento del libro habla de otros factores intervinientes como la libertad, que la considera la base de la ética, ya que su principal consejo a Amador, es que piense por si mismo, que busque dentro de él cual es la respuesta.
El autor dice que el principal interés de la ética es, cómo vivir bien la vida humana, la vida que transcurre entre humanos, habla de tratar a los personas como personas, y no como cosas, es decir, tomar en cuenta lo que quieren y lo que necesitan y no sólo lo que puedes sacar de ellas. Relata la importancia de tomar el lugar de los otros, para tener una buena relación y lograr alcanzar la buena vida.
También platica de los placeres de la vida, los cuales la hacen intensamente grata, y originan la alegría. Explica que la ética apuesta a favor de que la vida vale la pena, ya que "hasta las penas de la vida valen la pena", porque a través de ellas es posible alcanzar los placeres.
Por último, Fernando Savater conversa sobre la ética en la política, reconoce todos los preconceptos existentes de este tema y hace referencia a frases muy dichas como “los políticos no tienen ética”. Sin embargo, el autor explica a su hijo que esto no es del todo cierto, dice que así como en muchos otros lugares, dentro de la política existe gente honesta y gente deshonesta, personas con ética y personas sin ella, y que esta mala fama es debido a que los políticos ocupan lugares especialmente vistos por la sociedad, por lo tanto sus defectos son más públicos que los de las personas restantes.
A lo largo de todo el texto, Fernando ejemplifica a su hijo todo lo que va diciendo con hechos mitológicos y de otras índoles, con el objetivo de hacer más grata y compresible la lectura a su hijo. Entre algunos reconocidos personajes que mencionó, podría hacerse referencia a Héctor, el mejor guerrero de Troya (historia relatada por Homero en la Iliada), Kane, personaje multimillonario de una famosa película, Esaú y Jacob, personajes bíblicos, Gargantua, protagonista de una de las primeras novelas europeas, entre otros.
Desde el comienzo hasta el final de la obra el autor recalca el carácter subjetivo y personal del libro, y aclara que no es un manual de ética para alumnos de bachillerato. Esta majestuosa obra es indudablemente una buena forma de mostrar el significado de la ética a los jóvenes.
El autor comienza el libro, con el relato de un hecho personal, sucedido entre él y su hijo (Amador), y realiza una breve introducción de lo que es la ética. Habla de cosas buenas y cosas malas, que las define como las cosas que nos convienen y las cosas que no, y resalta la existencia de una paradoja en estos conceptos. Con el desenvolvimiento del libro habla de otros factores intervinientes como la libertad, que la considera la base de la ética, ya que su principal consejo a Amador, es que piense por si mismo, que busque dentro de él cual es la respuesta.
El autor dice que el principal interés de la ética es, cómo vivir bien la vida humana, la vida que transcurre entre humanos, habla de tratar a los personas como personas, y no como cosas, es decir, tomar en cuenta lo que quieren y lo que necesitan y no sólo lo que puedes sacar de ellas. Relata la importancia de tomar el lugar de los otros, para tener una buena relación y lograr alcanzar la buena vida.
También platica de los placeres de la vida, los cuales la hacen intensamente grata, y originan la alegría. Explica que la ética apuesta a favor de que la vida vale la pena, ya que "hasta las penas de la vida valen la pena", porque a través de ellas es posible alcanzar los placeres.
Por último, Fernando Savater conversa sobre la ética en la política, reconoce todos los preconceptos existentes de este tema y hace referencia a frases muy dichas como “los políticos no tienen ética”. Sin embargo, el autor explica a su hijo que esto no es del todo cierto, dice que así como en muchos otros lugares, dentro de la política existe gente honesta y gente deshonesta, personas con ética y personas sin ella, y que esta mala fama es debido a que los políticos ocupan lugares especialmente vistos por la sociedad, por lo tanto sus defectos son más públicos que los de las personas restantes.
A lo largo de todo el texto, Fernando ejemplifica a su hijo todo lo que va diciendo con hechos mitológicos y de otras índoles, con el objetivo de hacer más grata y compresible la lectura a su hijo. Entre algunos reconocidos personajes que mencionó, podría hacerse referencia a Héctor, el mejor guerrero de Troya (historia relatada por Homero en la Iliada), Kane, personaje multimillonario de una famosa película, Esaú y Jacob, personajes bíblicos, Gargantua, protagonista de una de las primeras novelas europeas, entre otros.
Desde el comienzo hasta el final de la obra el autor recalca el carácter subjetivo y personal del libro, y aclara que no es un manual de ética para alumnos de bachillerato. Esta majestuosa obra es indudablemente una buena forma de mostrar el significado de la ética a los jóvenes.
